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¿Qué beneficios obtiene mi empresa implantando un Sistema de gestión de Compliance laboral?

La función de Compliance laboral, se sitúa en la segunda línea de defensa de la organización. A ella le corresponde la misión de diseñar, analizar y gestionar todos los riesgos derivados de eventuales incumplimientos de la normativa laboral.

Sin embargo, es una figura que puede confundirse con otras vinculadas a la relación laboral, y para ello debemos acudir a los elementos que la diferencien de figuras como la de auditor laboral, y asesor jurídico.

Si en la auditoria laboral hablamos de la intervención de un tercero independiente, en la figura del Compliance officer laboral, la misión será velar por el cumplimiento normativo y por los intereses de todas aquellas personas que se relacionan con la empresa.

Por su parte la figura del asesor jurídico tendrá como objetivo, fundamentalmente, la interpretación jurídica de la norma y la protección de los intereses de la empresa. Observamos así que, si bien las tres figuras tienen elementos comunes, existen diferencias en cuanto al alcance de su actividad.

Hablamos así  de la gestión de riesgos en la empresa, y en el ámbito laboral, como garante de la gestión de riesgos derivados de eventuales incumplimientos, encontramos los antecedentes en la Ley 31/1995 de prevención de riesgos laborales.

Así el art. 4.2 de la referida Ley define el riesgo laboral como “la posibilidad de que un trabajador sufra un determinado daño derivado del trabajo. Para calificar un riesgo desde el punto de vista de su gravedad, se valorarán conjuntamente la probabilidad de que se produzca el daño y la severidad de este”

Con esta definición de riesgo laboral, y la de cultura de Compliance que propone la norma UNE-ISO 19600, evolucionamos hacia un conjunto de valores, ética y creencias de una organización que no se limitan al mero cumplimiento normativo.

Esta situación permite a las empresas abordar la gestión de riesgos, transformando éstos en una oportunidad de mejora.

 

Nos quedamos así con tres Ideas clave. –

  • El empresario, como sujeto principal  de imputación de obligaciones labores debe actuar como garante del cumplimiento de las normas laborales.
  • Se deben valorar los riesgos por incumplimiento no solo de la empresa, sino en su relación con terceros, como pueden ser los supuestos de subcontratación.
  • No debemos reducir el ámbito objetivo a la normativa laboral, sino también a aquella derivada de la propia actividad (delitos en el ámbito laboral, protección de datos, o protección intelectual) en el marco del contrato de trabajo.

 

Con ello identificamos la función de Compliance laboral, desde una triple perspectiva:

 

Una vez hemos entendido el concepto, nos surge la siguiente pregunta, ¿Cómo implantamos un Sistema de Compliance laboral en nuestra empresa?

Todo Sistema de Gestión de Compliance debe incluir, como mínimo, los siguientes aspectos:

  • Identificación y análisis de los riesgos legales por incumplimiento.- En el ámbito laboral utilizaríamos como referencia las siguientes áreas:

 

  • Clasificación de los riesgos detectados en atención a su probabilidad
  • Establecimiento de políticas, programas y procedimientos tendentes a minimizar las consecuencias del riesgo por incumplimiento. Podríamos incorporar así:
    • Código de conducta
    • Código de buenas prácticas
    • Canales de denuncia
    • Pactos de empresa (en materia salarial o de jornada, por ejemplo)
    • Compromisos de RSE
    • Acuerdos alcanzados con los representantes de los trabajadores

 

  • Evaluación y seguimiento del programa de cumplimiento normativo

 

 

Y después de todo ello nos planteamos ¿Qué beneficios obtiene mi empresa implantando un Sistema de gestión de Compliance laboral?

  • Mayor conocimiento de la organización
  • Identificamos el grado de cumplimiento de las obligaciones laborales
  • Cultura empresarial más ética
  • Evitamos riesgos reputacionales
  • Mejoramos la gestión corporativa

Si ya hemos decidido empezar con la implantación de un SGC Laboral, no podemos olvidar que la clave del éxito radica en:

 

 

 

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